El sol y la luna parecían ahogados en un estanque de peces muertos.
Dejé caer la flor de tus deseos y flotó en la superficie aceitosa.
Antes de hundirse en el fango del cielo infectado de estrellas.
martes, 31 de marzo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario